martes, enero 01, 2013

JUEVES 31 DE ENERO DEL 2013.

PRIMERA LECTURA. Hebreos 10,19-25.

19Hermanos, tenemos libertad para entrar en el santuario llevando la sangre de Jesús, 20y tenemos un acceso nuevo y viviente que él nos ha abierto a través de la cortina, que es su carne, 21y tenemos además un gran sacerdote al frente de la familia de Dios.
              22Acerquémonos, pues, con sinceridad y plenitud de fe, purificados en lo íntimo de toda conciencia de mal y lavados por fuera con agua pura; 23aferrémonos a la esperanza inamovible que profesamos, pues fiel es quien hizo la promesa, 24y considerémonos unos a otros para acicate del amor mutuo y del bien obrar, 25sin faltar a nuestra reunión, como algunos suelen; animaos, en cambio, y mucho más viendo que se acerca aquel día.

Explicación.

Gracias a Jesús, está abierto el acceso a Dios; cada cristiano tiene el privilegio del antiguo sumo sacerdote (19-21). El acceso a Dios se abre por la fe, que ha obtenido el perdón; en lo íntimo, por la experiencia interior del Espíritu; lavados, el rito del bautismo; por la esperanza, basada en la fidelidad a Dios; por el amor a todos, expresado en la acción y en la reunión eucarística (22-24); los que faltan a la reunión se hacen unos insolidarios de los demás, en la circunstancia difícil de la persecución (cf. v. 35); creencia en la cercanía de la reivindicación (25).

SALMO. 24,1-6.

Sal 15; Is 33,14-16.

1 Del Señor es la tierra y cuanto la llena,
el orbe con sus habitantes,
2 pues él la fundó sobre las mares,
sobre las corrientes la afianzó.
3 -¿Quién puede subir al monte del Señor?,
¿´quién podrá estar en el reino sacro?
4 -El de manos inocentes y puro corazón,
el que no acude a los ídolos
ni jura en falso.
5 Ése recibirá del Señor la bendición
y la justicia de Dios su Salvador.
6 -Ése es el grupo que lo busca;
que viene a visitarte, Dios de Jacob.


 Explicación.

24,1-2 Toma la imagen de fundadores y constructores de ciudades (Gn 4,17; Jos 6,26; 1 Re 16,34), y la atribuye a Dios, fundador de la tierra: Sal 78,69; 89,12; 102,26; Job 38,4-7. Los hombres asientan sobre roca o terreno firme; Dios cimienta la tierra sobre el movedizo e inestable océano. Por debajo de los continentes discurren corrientes que afloran en los manantiales.

24,2 Job 38,4-7.

24,3 El "recinto" o lugar santo supone previa elección y consagración: frecuente en Deuteronomio.

24,4-6 Juntan cualidades éticas con buscar a Dios, sin definir exactamente la relación.

24,4 Manos y corazón son un merismo que incluye toda clase de acciones, pensamientos y deseos. Siguen dos preceptos del decálogo. "Acudir": la expresión hebrea parece significar una tendencia intensa hacia algo: cfr. Dt 24,25; Prov 19,18.

24,5 Aunque mencione al patriarca Jacob creo que se refiere a las bendiciones condicionadas de la alianza. La "justicia" es la que consiste en la observancia, según Dt 6,25.

24,6 No se trata de una procesión formalista, realmente vienen buscando a Dios, en el templo.

TRANSPOSICIÓN CRISTIANA.

1 Cor 10,26, cita el primer verso del salmo para justificar la libertad cristiana. La tradición antigua y la liturgia aplican el salmo a la ascensión de Jesucristo; algunos autories componen con la fantasía una escena celeste, con diálogo de ángeles. El cortejo se identifica con la comunidad cristiana. 

EVANGELIO. Marcos 4,21-25.

21Y siguió diciéndoles:
-¿Acaso se trae la lámpara para meterla debajo del perol debajo de la cama? ¿No es para ponerla en el candelero? 22Porque si algo está escondido es sólo para que se manifieste, y si algo se ha ocultado es solamente para que salga a la luz. 23¡Si alguno tiene oídos para oír, que escuche!
24y siguió diciéndoles:
-¡Atención a lo que vais a escuchar! La medida que llenéis la llenarán para vosotros, y con creces, 25pues al que produce se le dará, pero al que no produce le quitarán hasta lo que había recibido.  

Explicación.
El secreto que ellos conocen deberá ser publicado en la futura misión (21-22). El fruto que se produce se verá multiplicado más allá de toda expectativa. Quien no produce, lo pierde todo (24-25).

MIÉRCOLES 30 DE ENERO DEL 2013.

PRIMERA LECTURA. Hebreos 10,11-18.


11Los sacerdotes están todos de pie cada día celebrando el culto, ofreciendo una y otra vez los mismos sacrificios, que son totalmente incapaces de quitar los pecados. 12Éste, en cambio, después de ofrecer un sacrificio único por los pecados, se sentó para siempre a la derecha de Dios. 13No le queda más que aguardar a que "pongan a sus enemigos por estrado de sus pies", 14pues con una ofrenda única dejo transformados para siempre a los que va consagrando.
                15Lo mismo atestigua el Espíritu Santo; porque, después de haber dicho: 16"Ésta es la alianza que haré con ellos cuando lleguen aquellos días", dice el Señor: "Al dar mis leyes, las escribiré en sus corazones y en su razón; 17de sus pecados y de sus crímenes no volveré a acordarme" (Jr 31,33-34). 18Ahora bien, donde el perdón es un hecho, ya no hay más ofrendas por el pecado.

Explicación.

Los múltiples sacerdotes ofrecen múltiples sacrificios inútiles. El único sacerdote ofrece el único sacrificio -su propia existencia- eficaz para siempre (se sentó, etc., Sal 110,1) (11-14).

              Testimonio del profeta (Jr 31,33-34): cambio de corazón contra rito exterior; olvido del pecado en vez de mención anual de los pecados (15-16; cf. v.3). Antes, repetición de ritos expiatorios (v.1); ahora, los ritos expiatorios son innecesarios y han cesado (18).
 
SALMO. 110,1-4.


(Sal 2; 45; 89)
1Oráculo del Señor a mi señor;
«Siéntate a mi derecha
hasta que haga de tus enemigos
escabel de tus pies».

2EI Señor extenderá desde Sión
el poder de tu cetro.
Somete en la batalla a tus enemigos.
3Tu ejército es de voluntarios
el día de la movilización.
Una majestad sagrada
llevas desde el seno materno.
de la aurora, un rocío de juventud.
4EI Señor lo ha jurado
y no se arrepiente:
«Tú eres sacerdote eterno
según el rito de Melquisedec. 
 
Explicación.
110,1 La "diestra" es el puesto de honor: véase Sal 80,18. El "escabel" donde el rey apoyaba los pies llevaba a veces pintadas o en relieve figuras de extranjeros sometidos: compárese con Jos 10,24; 1 Re 5,17.
110,2 En Sal 45,6 el cetro es recto, aquí es "poderoso". Sión es la capital del reino o del pequeño imperio.
110,3 Este verso enigmático ha suscitado interpretaciones variadas y divergentes. Las reduzco a dos grupos: militar y de entronización. a) 'am = ejército, nedabot = voluntarios (Jue 5,2.9), yom hel = día de (movilizar) la tropa, hadar qodesh = majestad sacra; como prenda de consagración y don de valentía militar, recibe el rey la bendición celeste en forma de rocío matutino, "auroral" (Ecl 11,12), como frescura de "adolescencia". b) 'mk ndbwt « tu familia (es) de nobles, ywm hllk (corregido) = cuando naciste, hdr (corregido) qdsh = atrio sagrado, yldtyk = te engendré, mshr = antes de la aurora. La primera explicación tiene carácter militar, la segunda evoca algo trascendente y misterioso. Doy la versión de la Vulgata, que depende de la griega (LXX): "Tecum principium in die virtutis tuae, in splendoribus sanctorum; ex utero ante luciferum genui te".
110,4 "No se arrepiente": es decir, irrevocable. El episodio de Gn 14 es enigmático en su intención, aunque claro en el relato. 
Trasposición cristiana.
Es curioso que un salmo tan militarista sea uno de los preferidos del NT. Ha sido necesaria una doble operación: seleccionar un par de versos, según la versión griega, y cambiar la identificación de los enemigos. V.1: Mt22,41-46par; Mt26,64; Mc 16,19; Hch 2,34s; 1 Cor 15,25s; Ef 1,20; 1 Pe 3,22. V. 4: comentario en Heb 5,6.10; 6,10; 7. 
 
EVANGELIO. Marcos 4,1-20.

(Mt 13,1-9; Lc 8,4-8)  


1De nuevo empezó a enseñar junto al mar. Se congregó alrededor de él una multitud grandísima; él entonces se subió a una barca y se quedó sentado, dentro del mar. Toda la multitud se quedó en la tierra, de cara al mar, 2y se puso a enseñarles muchas cosas con parábolas. En su enseñanza, les dijo:
3-¡Escuchad! Una vez salió el sembrador a sembrar. 4Sucedió que, en la siembra, algo cayó junto al camino; llegaron los pájaros y se lo comieron. 5Otra parte cayó en el terreno rocoso, donde apenas tenía tierra; como la tierra no era profunda, brotó en seguida, 6pero cuando salió el sol se abrasó y, por falta de raíz, se secó. 7Otra cayó entre las zarzas: brotaron las zarzas, la ahogaron, y no llegó a dar fruto. 8Otros granos cayeron en la tierra buena: a medida que brotaban y crecían fueron dando fruto, produciendo treinta por uno y sesenta por uno y ciento por uno.
9Yañadió:
-¡Quien tenga oídos para oír, que escuche!  

Aparte de Jesús con sus seguidores (Mt 13,10-23; Lc 8,9-18)

10Cuando se quedó a solas, los que estaban en torno a él )e preguntaron con los Doce la razón de usar parábolas.
11 El les dijo:
-A vosotros se os ha comunicado el secreto del reino de Dios; ellos, en cambio, los de fuera, todo eso lo van teniendo en parábolas, 12para que

por más que vean no perciban
y por más que escuchen no entiendan,
a menos que se conviertan y se les perdone (Is 6,9-10).

13Les dijo además:
 -¿No habéis entendido esa parábola? Entonces, ¿cómo vais a entender ninguna de las otras? 14El sembrador siembra el mensaje. Estos son «los de junto al camino»: aquellos donde se siembra el mensaje, pero, en cuanto lo escuchan llega Satanás y les quita el mensaje s embrado en ellos. 16Estos son «los que se siembran en terreno rocoso»: los que, cuando escuchan el mensaje en seguida lo aceptan con alegría, 17pero no echa raíces en ellos, son inconstantes: por eso, en cuanto surge una dificultad o persecución por el mensaje, fallan. 18Otros son «los que se siembran entre las zarzas»: éstos son los que escuchan el mensaje, 19pero las preocupaciones de este mundo la seducción de la riqueza y los deseos de todo lo demás van penetrando, ahogan el mensaje y se queda estéril. 20y ésos son «los que se han sembrado en la tierra buena»: los que siguen escuchando el mensaje, lo van haciendo suyo y van produciendo fruto: treinta por uno y sesenta por uno y ciento por uno. 
 
Explicación.
(4,1-9):Jesús no se acobarda ante la oposición oficial y vuelve a enseñar en público. El mar, paso a los pueblos paganos (cf 1,16; 2,13; 3,7a). Mientras enseña a un grupo, se acerca una gran multitud, necesariamente de descontentos con el sistema, con el que Jesús ha roto públicamente, pero penetrada aún por la ideología del judaísmo (se congregó, cf 1,33). Jesús interrumpe su enseñanza, sube a una barca (no suya) y comienza de nuevo a enseñar, pero de otra manera, como había hablado a los letrados (3,23: comparaciones/parábolas). Tiene así en cuenta la ideología de la multitud, que ve en él un caudillo para su lucha contra el sistema injusto y capaz de liberar a Israel de la opresión. Comenzar por una exposición abierta del mensaje, basado en la entrega personal y
en la constitución de una sociedad nueva y universal, la alejaría para siempre. La asimilación, si se produce, ha de ser lenta. La exhortación inicial: Escuchad (3), recuerda la llamada a Israel de Dt 6,4. El sembrador representa a Jesús. 
(4,10-20): Aparte de Jesús con sus seguidores. Aparecen los dos grupos: a) los Doce (= Israel mesiánico, cf. 3,13-19) Y b) los que estaban en torno a él (los seguidores no israelitas, cf. 3,32.34). Estos últimos se unen a los Doce para preguntar a Jesús el motivo de hablar en parábolas. Piensan que el mensaje es accesible a la multitud; no ven diferencia entre ellos y la gente (10). Jesús les indica la diferencia. El secreto del reino de Dios ha sido expuesto en 2,1-3,12: admisión de los paganos en el Reino, cancelación del pasado pecador y creación del hombre nuevo por la fe en Jesús (2,1-13, paralítico); nueva comunidad que integra lo mismo a los israelitas que a los excluidos de Israel: igualdad de todos los pueblos, cesando el privilegio de Israel (2,14-17, Leví, en la casa); alianza nueva que hace caducar las instituciones de Israel (2,18-22, el novio/esposo); el hombre nuevo, por encima de la Ley (2,23-28); norma suprema, el bien del hombre; arriesgar la vida por procurarlo; ruptura con la institución judía que inutiliza al hombre (3,1-7a); se excluye la liberación por la violencia (3,7b-12). Los seguidores de Jesús habrían debido comprender esto; los de fuera (únicos destinatarios de las parábolas) no pueden comprenderlo a menos que se conviertan (= den su adhesión a Jesús) y sean liberados de su pasado (11-12). A menos que (12), según la interpretación rabínica del dilemá targúmico. 
No han entendido la parábola, porque no se esperaban que Jesús hablase de disposiciones interiores, sino de acción exterior (13). Los cuatro terrenos son cuatro disposiciones del hombre ante el mensaje: a) no lo deja penetrar (cf. 10,46ss) (Satanás, la ideología/ambición de poder lo neutraliza y no deja huella); b) lo acepta superficialmente, sin compromiso serio (cf. 14,27-31); c) no renuncia a la ambición de dinero (cf. 10,26); d) lo hace propio y da fruto (14-20).
 
 

MARTES 29 DE ENERO DEL 2013.

PRIMERA LECTURA. Hebreos 10,1-10.

1Pues, poseyendo la Ley sólo una sombra de los bienes que habían de venir y no la imagen misma de lo real, con los sacrificios, siempre los mismos, que se ofrecen indefectiblemente año tas año, nunca puede transformar a los que se acercan. 2 O ¿es que no dejarían de ofrecerse si los que practican el culto quedasen purificados de una vez y perdiesen toda conciencia de pecado? 3Por el contrario, en esos sacrificios se recuerdan los pecados año tras año.
                  4Es que es imposible que sangre de toros y cabras quite los pecados; 5por eso, al entrar en el mundo dice él:

                   Sacrificios y ofrendas no los quisiste,
                   en vez de eso, me has dado un cuerpo a mí;
                  6holocaustos y víctimas expiatorias
                  no te agradan;
                  7entonces dije: "Aquí estoy yo
                  (en un título del libro está escrito de mí)
                   para realizar tu designio, Dios mío" (Sal 40,7-9 LXX).

                  8Primero dice: "Sacrificios y ofrendas, holocaustos y víctimas expiatorias ni los quieres ni te agradan" -éstos son los que manda ofrecer la Ley- 9y después añade: "Aquí estoy yo para realizar tu designio". Deroga lo primero para establecer lo segundo. 10Por esa voluntad hemos quedado consagrados, mediante la ofrenda del cuerpo de Jesús Mesías, única y definitiva.

Explicación.

  Hasta ahora se ha aludido solamente a la abolición de la Ley, al explicar el cambio de sacerdocio (7,12). Pero también la Ley peretnece al mundo de las "sombras", no al de la realidad. La repetición de los sacrificios en la antigua Ley muestra su inutilidad y prueba que la religión ritual es incapaz de quitar la conciencia del pecado, de dar la seguridad del perdón (1-3).

               Esta situación no podía ser definitiva, y el autor lo prueba con la cita de Sal 40,6-8, considerado como profecía mesiánica (está escrito de mí). El único sacrificio válido es la entrega del hombre a la realización del designio de Dios (4-7). Este nuevo sacrificio invalida todos los anteriores, y gracias a la entrega de Jesús Mesías, el hombre está capacitado para realizar este designio (8-10).

SALMO. 40,2.4.7-8.10-11.


2 Yo esperaba con ansia al Señor:
se inclinó a mí y escuchó mi grito.

4 Me puso en la boca un canto nuevo
de alabanza a nuestro Dios.
Muchos al verlo quedaron sobrecogidos
y confiaron en el Señor.

7 Sacrificios y ofrendas no los quieres;
me has cavado oídos;
no pides holocaustos ni víctimas expiatorias.
8 Entonces yo digo: "aquí he venido".
En el texto del rollo se escribe de mí

10 He proclamado el derecho
a una asamblea numerosa.
No he cerrado los labios,
Señor, tú lo sabes.
11 No me he guardado en el pecho tu justicia,
he anunciado tu verdad y tu salvación,
no he negado tu lealtad y fidelidad
a la asamblea numerosa.


Explicación.

40,2-4 El comienzo es una secuencia en cuatro escenas rápidas. Un hombre se debate en el lodo de una ciénaga, que amenaza tragárselo aprovechando sus esfuerzos; grita. Alguien lo saca y coloca sus pies en roca firme. Al sentir la solidez bajo los pies, rompe a cantar de gozo y agradecimiento. Un grupo que asistía expresa su confianza en el liberador.

40,2 La forma enfática traduce la expectación, casi la impaciencia del aguardar.

40,4 "Poner en la boca" es fórmula de alcance profético: Dt 18,18; Jr 1,9; 5,14.

40,7-9 Es importante apreciar paralelismos y correlaciones. En esquema: sacrificios / holocaustos, oídos / escrito, vengo / quiero. El primero es un merismo que abarca el culto. El segundo sugiere un encargo oral y uno escrito. El tercero es correlativo del anterior y se articula en dos piezas complementarias: el acto de presentarse y la disponibilidad para ejecutarlo.

40,7 Los sacrificios se relativizan (Eclo 34,18-35,26). "Cavar los oídos" es metáfora única. La imagen parece fijarse en la hondura corporal que abre el oído hacia el interior del hombre: compárese con Is 50,4s.

40,8b-9 Lo que más interesa del texto es la asimilación del encargo y por implicación del tema. Lo que estaba en un "escrito", pasa a estar "en las entrañas"; el texto de la proclamación está amorosamente asimilado. Compárese con Ez 3,3.

40,10-11 La proclamación se enuncia en cuatro verbos y seis sustantivos. El insistir en formas negativas, el apelar al testimonio de Dios, hace sospechar algún riesgo en el encargo, como si algo grave indujera al silencio. El verbo positivo, "evangelizar", significa en la vida civil anunciar una buena noticia. Es típico del profeta del destierro, que también tropezaba con resistencia y hostilidad: Is 40,9; 41,27; 52,7 y 60,6; 61,1; Sal 96,2. El "derecho" recurre también en Is 41,2-10; 42,6.21; 45,19; 51,1.5.7. Los otros sustantivos, con posesivo "tu", pertenecen a una tradición ancha, también presente en el salterio.
Ahora imaginemos que ha comenzado la predicación, que provoca resistencia, oposición, persecución; el orante invoca el auxilio de quien le encomendó la tarea. Es lo que sigue en 12-18.   

 TRANSPOSICIÓN CRISTIANA.

La carta a los Hebreos recoge y comenta la parte central del salmo, según la versión griega de los LXX. En vez de "me cavaste oídos", dice "me aparejaste un cuerpo"; traduce "rollo" por "título". De este modo opone el autor a los sacrificios antiguos la entrega del Mesías. De aquí arranca el uso de los antiguos de poner todo el salmo en boca de Cristo y después en boca de la Iglesia.

EVANGELIO. Marcos 3,31-35.

La nueva familia de Jesús
(Mt 12,46-50; Lc 8,19-21)

31Llegó su madre con sus hermanos y, quedándose fuera, lo mandaron llamar. 32Una multitud de gente estaba sentada en torno a él. Le dijeron:
-Oye, tu madre y tus hermanos te buscan ahí fuera.
33Él les contestó:
-¿ Quiénes son mi madre y mis hermanos?
34Y, paseando la mirada por los que estaban sentados en corro en torno a él, añadió:
-Mirad a mi madre y a mis hermanos. 35Cualquiera que cumpla el designio de Dios, ése es hermano mío y hermana y madre.

EXPLICACIÓN.

(3,31-35): En paralelo con los Doce, que estaban con Jesús en casa» (3,20), aparece el grupo de seguidores que no procede de la institución judía. Contraste entre la familia que se queda fuera y los que están sentados en torno a Jesús (= «estar con Jesús», cf 3,14, la adhesión incondicional y permanente). La madre, sin nombre, es figura del antiguo Israel, del que procede Jesús; los hermanos, de los judíos de su comarca. No se trata tanto de las personas como de mostrar la hostilidad hacia Jesús del ambiente donde se ha criado (31-32). La nueva familia, independiente de raza o pueblo. Única condición para pertenecer, cumplir el designo de Dios = dar la adhesión a Jesús (34-35; cf. 2,5: la fe). Jesús no se considera vinculado a su pueblo (madre, hermanos), que rechaza el mensaje, sino a cualquier hombre que le dé su adhesión. 

LUNES 28 DE ENERO DEL 2013.

PRIMERA LECTURA. Hebreos 9,15.24-28.

15Por esta razón es mediador de una alianza nueva: para que, después de una muerte que librase de los delitos cometidos con la primera alianza, los llamados puedan recibir la herencia perenne, objeto de la promesa.
24y de hecho el Mesías no entró en un santuario hecho por hombres, copia del verdadero, sino en el mismo cielo, para presentarse ahora nte Dios en favor nuestro. 25Y no era tampoco para ofrecerse repetidas veces, como sl sumo sacerdote, que entra año tras año en el santuario, llevando una sangre que no es la suya; 26si no habría tenido que sufrir muchas veces desde que se creó el mundo. De hecho, su manifestación ha tenido lugar una sola vez, al final de la historia, para abolir con su sacrificio el pecado.
           27Por cuanto es destino de cada hombre morir una vez, y luego un juicio, 28así también el Mesías se ofreció una sola vez, para quitar los pecados de tantos; la segunda vez, ya sin relación con el pecado, se manifestará a los que lo aguardan para salvarlos.

EXPLICACIÓN.

La primera alianza no liberaba del pecado e impedía alcanzar la promesa (15).

El único sacrificio del Mesías, su muerte, expresión suprema del amor, bastó de una vez para todas (24-26).

          Los pecados hacían de la muerte y el juicio motivos de temor. La situación ha cambiado: la única entrega de Jesús ha cancelado los múltiples pecados, y su segunda venida será sólo para salvación (27-28).

SALMO. 98,1-6.

(Sal 96; Is 40-55)

1Cantad al Señor un cántico nuevo
porque ha hecho maravillas;
su diestra le ha dado la victoria,
su santo brazo.
2EI Señor da a conocer su victoria,
revela su justicia a la vista de los pueblos.
3Se acordó de su lealtad y fidelidad
para la Casa de Israel.
Los confines de la tierra han contemplado
la victoria de nuestro Dios.
4Vitorea al Señor, tierra entera,
gritad, aclamad, tañed:
5tañed la cítara para el Señor
la cítara al son de instrumentos.
6Con clarines y al son de trompetas
vitoread ante el Señor y Rey. 
Explicación.
 
98,1 Ap 5,9; 14,3.
98,1-3 Notamos una "victoria" singular y "maravillas" plurales. La explicación está en el "recuerdo" del Señor, el cual ha sido coherente con su modo de proceder, ha mantenido su "lealtad". La acción ha sido a favor de Israel y "justa", la manifestación es universal: Israel es escenario de la actuación de Dios.
98,4-6 En la música instrumental y vocal reconoce el salmista un acto superior de alabanza. La vocal exalta la palabra, intensifica la expresión; la instrumental templa y acuerda los sonidos naturales. 
Trasposición cristiana.

El tema del "venir" se realiza en el "adviento", en el Mesías "que ha de venir"; doble adviento, histórico y escatológico; ambos celebrados en nuestro adviento litúrgico. El segundo tema es el reinado, dominante en el NT: universal y justo. Al "cántico nuevo" se refiere Ap 5,9s. 

EVANGELIO. Marcos 3,22-30.

Reacción oficial. Los letrados de Jerusalén. Respuesta de Jesús (Mt 12,22-32; Lc 11,14-23; 12,10)

22Los letrados que habían bajado de Jerusalén iban diciendo:
-Tiene dentro a Belcebú.
Y también:
-Expulsa los demonios con poder del jefe de los demonios.
23Él los convocó y, usando comparaciones, les dljo:
¿ Cómo puede Satanás expulsar a Satanás? 24Si un reino se divide internamente, ese reino no puede seguir en pie; 25 y si una familia se divide internamente, no podrá esa familia seguir en pie. 26Entonces, si Satanás se ha levantado contra sí mismo y se ha dividido, no puede tenerse en pie, le ha llegado su fin.
27Pero no, nadie puede meterse en la casa del fuerte y saquear sus bienes si primero no ata al fuerte; entonces podrá saquear su casa.
28Os aseguro que todo se perdonará a los hombres, las ofensas y, en particular, los insultos, por muchos que sean; 29pero quien insulte al Espíritu Santo no tiene perdón jamás; no, es reo de una ofensa definitiva.
30Es que iban diciendo:
-Tiene dentro un espíritu inmundo. 

Explicación.

(3,22-30): También las autoridades centrales quieren neutralizar el peligro que representa Jesús para la institución. Unos letrados (maestros de la ideología oficial), llegados de Jerusalén, lo difaman, acusándolo de magia (ser agente del jefe de los demonios); afirman, por tanto, que liberar de la sumisión a la doctrina oficial (expulsar demonios), como hace Jesús, es un mal, y que Jesús es un enemigo de Dios (agente del diablo) (22). Aunque eludían el encuentro, Jesús los convoca, mostrando así su autoridad sobre los enemigos del reino de Dios (23). Les demuestra lo absurdo de su acusación: Satanás (figura del poder y de la ambición de poder) no dará nunca verdadera libertad al hombre, sería destruirse a sí mismo (24-26). Al rebatirles la acusación, muestra Jesús que son ellos los que están de parte de Satanás (el poder) y contra la libertad del hombre. El fuerte (27), figura satánica de poder, representa la institución judía; su casa, el ámbito de su dominio; Jesús pretende sacar al pueblo (sus bienes) del dominio de la institución, anulando el influjo de ésta (atar/o), ejercido mediante la doctrina. Afirmación solemne y grave: todo puede ser perdonado (28) excepto el insulto al Espíritu Santo (29), la mala fe, mostrada aquí al atribuir al espíritu inmundo (30) la liberación que efectúa el Espíritu de Dios (los letrados conocían bien la historia de Israel, que tuvo principio con la liberación de Egipto, y los escritos proféticos, cf. Is 1,17; 58,6s; 61,1; J r 21,11 s; 22, 15s; Ez 34,2-4; Sal 72,4.12-14).  

DOMINGO 27 DE ENERO DEL 2013.

PRIMERA LECTURA. Nehemías 8,2-4.5-6.8-10.

2El sacerdote Esdras trajo el libro de la Ley ante la asamblea, compuesta de hombres, mujeres y todos los que tenían uso de razón. 3Era a mediados de septiembre. En la plaza de la Puerta del Agua, desde el amanecer hasta el mediodía, estuvo leyendo el libro a los hombres, a las mujeres y a los que tenían uso de razón. Toda la gente seguía con atención la lectura de la Ley.
4Esdras, el letrado, estaba de pie en el púlpito de madera que había hecho para esta ocasión. A su derecha se encontraba Matitías, Sema, Anayas, Urías, Jelcías y Maseyas; a su izquierda, Fedayas, Misael, Malquías, Jasún, Jasbadana, Zacarías y Mesulán. 5Esdras abrió el libro a la vista de todo el pueblo -pues se hallaba en un puesto elevado-, y cuando lo abrió, toda la gente se puso en pie. 6Esdras bendijo al Señor, Dios grande, y todo el pueblo, levantando las manos, respondió: "Amén, amén". Después se inclinaron y adoraron al Señor, rostro en tierra.
8Leían el libro de la Ley de Dios traduciéndolo y explicándolo para que se entendiese la lectura. 9El gobernador Nehemías, el sacerdote y letrado Esdras y los levitas que instruían al pueblo, viéndo que la gente lloraba al escuchar la lectura de la Ley, le dijeron:
-Hoy es un día consagrado al Señor, vuestro Dios. No estéis tristes ni lloréis.
10Después añadió:
-Id a casa, comed buenas tajadas, bebed vinos generosos y enviad porciones a los que no tienen nada, porque hoy es día consagrado a nuestro Dios. No ayunéis, que al Señor le gusta que estéis fuertes.

Explicación.

8-10. Sigue una serie de ceremonias y fiestas litúrgicas que se celebran apenas terminado el verano y las faenas del campo: lectura pública de la Ley, fiesta de las Chozas, liturgia penitencial, alianza con Dios. A lo largo de las tres primeras se lee el libro de la Ley, en la alianza final culmina la celebración.

El calendario oficial recogido en el Levítico no nos aclara la relación de las diversas ceremonias aquí descritas: señala fiesta el primero del mes séptimo (mediados de septiembre); el dia diez pone la fiesta de la Expiación; del día quince al veintiuno, la semana de las Chozas (Lv 23; Nm 29); según Dt 31,9-13, la lectura de la Ley se repetirá cada siete años en la fiesta de las Chozas.

8,1. Da la impresión de que la ceremonia se celebra por iniciativa popular y en sitio profano; mientras que las ceremonias litúrgicas eran convocadas por los sacerdotes. Actúa Esdras, no el sumo sacerdote Eliasib o Yoyadá: quizá porque éste no era partidario o entusiasta de la reforma. Junto a Esdras encontramos a Nehemías, en buen acuerdo del poder civil con un representante religioso, en sucesión aproximada de Zorobabel y Josué (sucesor de David y sumo sacerdote). Algunos piensan qu la presencia de Nehemías en el v.9 se debe a la adición de un glosador. El libro leído podría ser el Deuteronomio de Josías, quizá ampliado (2 Re 22), o un Pentateuco relativamente completado: es decir, narración, Ley y parénesis, que ofrecía lectura para bastantes días.

8,2. Dt 31,12 menciona "hombres, mujeres, niños y emigrantes". Y una adición del v. 13 incluye también a los niños antes del uso de razón.

8,3. Dt 31,9-13.

8,4. Incluido Esdras, aparecen catorce personas en la tribuna.

8,5. El rito indica que se va a escuchar la lectura como Ley o instrucción del Señor.

8,8. Es dudoso y discutido el sentido de la palabra hebrea mprs. Si le damos el sentido de "traducir", indicaría que el pueblo ya no entendía el hebreo y necesitaba una traducción aramea. Si traducimos "a trozos", indicaría que Esdras leía desde su púlpito una sección o perícopa y los levitas la repetían en grupos a su alcance, y la comentaban.

8,9. El llanto del pueblo podía deberse a las amenazas y reproches que escuchaban (como en Jue 2,4). Era un gesto de compunción anticipada, que se debía reservar para la liturgia penitencial.

8,10. La última frase se podría traducir: "el gozo (= la fiesta) del Señor será vuestra fuerza". El gozo ha de ser compartido por todos, como enseña Dt 26,11 y 16,11.        
    
SALMO. 19,8-10.15.

8 La ley del Señor es perfecta:
devuelve el respiro;
el precepto del Señor es fiable:
instruye al ignorante;
9 los mandatos del Señor son rectos:
alegran el corazón;
la norma del Señor es límpida:
da luz a los ojos;
10 el respeto del Señor es puro:
dura para siempre;
los mandamientos del Señor son genuinos;
justos sin excepción;

15 Que te agraden las palabras de mi boca,
acepta mi meditación,

¡Señor, Roca mía, Redentor mío!

Explicación.

19,8-11 Tercera sección. Sin transición ni introducción entre un tema nuevo. Entra la ley abriendo paso a seis sentencias de una regularidad exasperante, como materializando en lenguaje el orden que intenta establecer. Sólo sies: falta una para la perfección.
Los predicados son en gran parte corpóreos: respiración, corazón, ojos; es límpida y pura, es estable y ofrece apoyo. Es razonable, no teme dar razones y así educa al inexperto sin dejarlo en su ignorancia. Es lúcida, no exige obediencia ciega, sino que ilumina los ojos. Da alegría interna, no es carga insoportable.
El último verso propone dos coparaciones: oro, símbolo y medida de valor; miel, manjar el más sabroso (Prov 16,24). El autor piensa en el contenido más que en la formalidad de la ley.

19,12-15a Cuarta sección. Con una partícula concesiva introduce una paradoja inesperada: la ley es perfecta, yo no; ilumina, pero muchas cosas se me ocultan; la saboreo y no logro cumplirla. Tres cosas humillan o amenazan al orante.
Inadvertencias. Al faltar el pleno conocimiento falta el pleno consentimiento, el reato formal. La ley desarrolla una serie de normas de trascendencia para afinar la conciencia, para alertar la advertencia: Lv 4*5; Nm 15.
Faltas ocultas. Podemos amplificar: malas inclinaciones, tendencias, motivos reprimidos, actitudes; cuanto el hombre se empeña en no ver: Sal 90,8.
Arrogancia. Es lo más grave: el delito a sabiendas y a conciencia: Nm 15,30; Dt 17,12. Es acción personal y es potencia que intenta someter al hombre: cfr. Gn 4,7. Pero el "siervo" de Dios no debe ser esclavo del pecado. Al sentirse impotente, el hombre apela a la gracia de Dios. Implora la absolución para salir "inocente"; con la ayuda de Dios será "íntegro" o perfecto.


TRANSPOSICIÓN CRISTIANA.

Rom 10,18 aplica el v.4 a la predicación del evangelio. El cristiano contempla la creación restaurada en Cristo. Los antiguos explotaron el símbolo del sol como esposo; su salida del tálamo de María en el nacimiento, su carrera "desde el Padre hasta el Padre"; su calor es el Espíritu. La reflexión sobre ley y gracia anticipa la enseñanza de Pablo.  

 
SEGUNDA LECTURA. 1 Corintios 12,12-30 o 12,12-14.27.

12Es un hecho que el cuerpo, siendo uno, tiene muchos miembros, pero los miembros, aun siendo muchos, forman entre todos un solo cuerpo. 13Pues tambén el Mesías es así, porque también a todos nosotros, ya seamos judíos o griegos, esclavos o libres, nos bautizaron con el único Espíritu para formar un solo cuerpo, y sobre todos derramaron el único Espíritu; 14y es que tampoco el cuerpo es todo el mismo órgano, sino muchos. 15Aunque el pie diga: "Como no soy mano, no soy del cuerpo", no por eso deja de serlo. 16Y aunque la oreja diga: "Como no soy ojo, no soy del cuerpo", no por eso deja de serlo. 17Si todo el cuerpo fuera ojos, ¿cómo podría oír?, si todo el cuerpo fuera oídos, ¿cómo podría oler? 18Pero, de hecho, Dios estableció en el cuerpo cada uno de los órganos como el quiso. 19Si todos ellos fueran el mismo órgano, ¿qué cuerpo sería ese? 20Pero no, de hecho hay muchos órganos y un solo cuerpo.
             21Además, no puede el ojo decirle a la mano: "No me haces falta", ni la cabeza a los pies: "No me hacéis falta". 22Al contrario, los miembros que parecen de menos categoría son los más indispensables 23y los que nos parecen menos dignos los vestimos con más cuidado. 24Lo menos presentable lo tratamos con más miramiento; los presentable no lo necesita.
            Es más, Dios combinó las partes del cuerpo procurando más cuidado a lo que menos valía, 25para que no haya discordia en el cuerpo y los miembros se preocupen igualmente unos de otros. 26Así, cuando un órgano sufre, todos sufren con él; cuando a uno lo tratan bien, con él se alegran todos.
           27Pues bien, vosotros sois cuerpo de Cristo, y cada uno por su parte es miembro. 28En la comunidad Dios ha establecido a algunos en primer lugar como apóstoles; en segundo lugar, como profetas; en tercer lugar, como maestros; luego hay obras extraordinarias; luego dones de curar, asistencias, funciones directivas, diferentes lenguas. 29¿Son todos apóstoles?, ¿son todos profetas?, ¿son todos maestros?, ¿hacen todos obras extraordinarias?, 30¿tienen todos dones de curar?,

EXPLICACIÓN.

12-30.     Para inculcar que los carismas o dones del Espíritu se dan para el bien común, Pablo utiliza una analogía popular entre los filósofos de su tiempo: los miembros de una sociedad o grupo humano están vinculados como los miembro de un mismo cuerpo; aquí, por obra del Espíritu, que crea la igualdad fundamental. Como sucede en el cuerpo, sin embargo, la diversidad no se opone a la unidad (12-13); más aún, es indispensable, porque las funciones son complementarias (14-20).

                Nadie puede considerarse autosuficiente (21) y no se puede prescindir de lo más humilde. Crítica implícita a los que desprecian a la gente sencilla (22-25). Solidaridad de tods (26).

               Aceptar las diferencias de funciones, querida por Dios; si todos los miembros de la comunidad tuviesen la misma función, no sería posible el servicio mutuo. Los dones más valiosos no son los más llamativos, sino los que más contribuyen a construir la comunidad. Apóstol, el que funda comunidades y las educa en la fe; profeta, el que transmite a la comunidad lo que el Señor quiere enseñarlo o indicarle; maestro, el que explica el mensaje de Jesús. Otros dones más ocasionales (27-28). No debe haber rivalidades (29-30). 

 
EVANGELIO. Lucas 1,1-4; 4,14-21.

1 1 Dado que muchos han intentado hacer una exposición ordenada de los hechos que se han verificado entre nosotros,
2 según lo que nos transmitieron los que desde un principio fueron testigos oculares y llegaron a ser garantes del mensaje,
3 he resuelto yo también, después de investigarlo todo de nuevo con rigor, ponértelo por escrito de forma conexa, excelentísimo Teófilo,
4 para que compruebes la solidez de las enseñanzas con que han sido instruido.


4 14 Con la fuerza del Espíritu regresó Jesúa a Galilea, y la noticia se difundió por toda la comarca.
15 Enseñaba en aquellas sinagogas, y todos se hacían lenguas de él.
16 Llegó a Nazaret, donde se había criado. El sábado entró en la sinagoga, según su costumbre, y se levantó para tener la lectura.
17 Le entregaron el volumen del profeta Isaías y, desarrollando el volumen, dio con el pasaje donde estaba escrito:

18 El Espíritu del Señor descansa sobre mí,
porque él me ha hungido.
Me ha enviado a dar la buena noticia a los pobres,
a proclamar la libertad a los cautivos,
y la vista a los ciegos,
a poner en libertad a los oprimidos,
19 a proclamar el año favorable del Señor
(Is 61,1-2).

20 Enrolló el volumen, lo devolvió al sacristán y se sentó. Toda la sinagoga tenía los ojos clavados en él,
21 y empezó a hablarles:
-Hoy ha quedado cumplido este pasaje ante vosotros que lo habéis escuchado.






EXPLICACIÓN.

La obra de Lc consta de dos partes, el Evangelio y los Hechos de los Apóstoles. La enseñanza y actividad de Jesús en el Ev. permite enjuiciar las tendencias existentes en la Iglesia primitiva que aparecen en Hechos.

Prólogo del Evangelio (1,1-4): Supone la existencia de evangelios anteriores (entre ellos el de Mc, utilizado por Lc), escritos conforme a una tradición viva en la comunidad cristiana (nos transmitieron), procedente de los testigos oculares que fueron reconocidos como depositarios auténticos del mensaje. El hecho de haberse decidido a investigarlo todo de nuevo y con rigor revela que las "exposiciones" precedentes no respondían plenamente a las circunstancias de la comunidad de Lucas y, posiblemente, que algunas de ellas eran tendenciosas. Escribir de forma conexa, exponer el desarrollo de los hechos poniendo de relieve la secuencia lógica de los acontecimientos. Teófilo, "el querido por Dios", representa probablemente a la comunidad a la que Lc se dirige. Propósito de Lc: confirmar la autenticidad del mensaje recibido.

14-21 Jesús, portador del Espíritu. Primera actividad, la enseñanza. Éxito: aceptación entusiasta en Galilea (14s). Escena programática en Nazaret, en contraste con el resto de Galilea. Nazaret representa los círculos nacionalistas fanáticos del pueblo judío. Conocían a Jesús y esperan que comparta sus ideales.

Según su costumbre (16) remite a su enseñanza (15): va a exponer en Nazaret lo mismo que en el resto de Galilea, pero va a encontrarse con el fracaso. Toma la iniciativa; él mismo busca el pasaje de Is 61,1s (18s), que se interpretaba en sentido mesiánico (profeta-Mesías). Combinando textos (incluye Is 58,6: a poner en libertad a los oprimidos), describe Lc la misión liberadora de Jesús, el Ungido por el Espíritu. En primer lugar, anunciar a los pobres el fin de su condición miserable (cf. 1,51-53; 2,10s); cautivos, ciegos, los oprimidos (1,79; Is 9,1s; 29,18ss; 35,5; 42,7; 60,1ss). Alusión al año jubilar (19: el año favorable del Señor), en que se cancelaban las deudas y se ponía en libertad a los esclavos (Lv 25); el antiguo uso se convierte en símbolo de liberación. Relación del pasaje con los cánticos del Servidor (Is 42,1.7), antítesis de la violencia y del nacionalismo particularista (Is42,4; 49,6; 51,4s) y que libera con su pasión y muerte (Is 52,13-53,2). Se explica así la omisión intencionada (20: enrolló el volumen, cortando el pasaje) del final de Is 61,2: "el día del desquite del Señor nuestro Dios", referido a la victoria sobre los paganos, y de su aplicación a Sión (Is 62,3). Se sentó, postura del maestro.

Tensa expectación (20): la lectura del texto mutilado, presentación programático, espera una explicación. En su pueblo había tenido aceptación (2,52), por pensarse que era hijo de José (3,23); ha llegado ahora acompañado de una nueva fama (4,14), por propia iniciativa ha leído un texto clásico de la expectación mesiánica, pero omitiendo el final. Jesús comienza el discurso aplicándose a sí mismo el pasaje del profeta: él es el Mesías liberador, se abre la era de la salvación, pero ésta es universal, no excluye a los paganos (21).

SÁBADO 26 DE ENERO DEL 2013.

PRIMERA LECTURA. II Timoteo 1,1-8 o Tito 1,1-5.

II Timoteo 1,1-8.

1Pablo, apóstol del Mesías Jesús por designio de Dios, conforme a las promesas de vida que hay en Jesús Mesías, 2a Timoteo, hijo querido: Te deseo el favor, la misericordia y la paz de Dios Padre y del Mesías Jesús, Señor nuestro.
                        3Doy gracias a Dios, a quien sirvo con limpia conciencia, como aprendí de mis antepasados, cuando te encomiendo en mis oraciones noche y día. 4Al acordarme de tus lágrimas, ansío verte, para llenarme de alegría 5refrescando la memoria de tu fe sincera, esa fe que tuvieron tu abuela Loide y tu madre, Eunice, y que estoy seguro tienes también tú.
                        6Por esta razón te recuerdo que reavives el don de Dios que recibiste cuando te impuse las manos; 7porque Dios no nos ha dado un espíritu de cobardía, sino un espíritu de valentía, de amor y de dominio propio.
                       8Por tanto, no te avergüences de dar testimonio de nuestro Señor, ni de que yo esté en la cárcel por él. Al contrario, sufre conmigo por el evangelio, con la fuerza de Dios

Explicación.

Saludo parecido al de la primera carta (1-2). Exordio: La acción de gracias tiene un cálido tono personal. Pablo fue educado en su tradición familiar, y lo mismo lo ha sido Timoteo, éste como cristiano (3-5).

                   Mientras en 1 Tim 4,13-16, el don concedido a Timoteo se refería a la enseñanza, en este pasaje concierne al testimonio; frutos del Espíritu son la valentía, el amor y la autodisciplina. Parece referirse, por tanto, a la actividad exterior, sin temer la persecución ni considerarla humillante. (8).
 
Tito 1,1-5.

1Pablo, siervo de Dios y apóstol de Jesús Mesías, para que crean los elegidos de Dios: para que conozcan la verdad propia de la piedad que se apoya 2en la esperanza de vida eterna. Dios, que no miente, 3había prometido esa vida desde tiempos inmemoriales; al llegar el momento ha cumplido su palabra públicamente con la predicación que me han confiado por disposición de Dios nuestro Salvador.
                     4Querido Tito, hijo legítimo en la fe común: te deseo el favor y la paz de Dios Padre y del Mesías Jesús salvador nuestro.

5Mi intención al dejarte en Creta era que acabaras de organizar lo que faltaba y nombrases responsables en cada ciudad, siguiendo las instrucciones que te di yo; EXPLICACIÓN.

1-4. Remitente y destinatario. Usa el autor un tono solemne; de hecho, toda la carta se mantiene en ese tono, sin calor personal. Aduce Pablo sus títulos para su misión como apóstol. Desde tiempos inmemoriales (2), cf. Ef 1,4. La promesa divina se realiza en la predicación del apóstol. Hijo legítimo, convertido por Pablo (cf. 1 Cor 4,15).

Pablo ha fundado comunidades en Creta (no hay ninguna otra noticia de este viaje) y ha dejado encargado a Tito de terminar la organización. Responsables (5), cf. 1 Tim 5,17.

SALMO. 96,1-3.7-8.10


(Sal 98; Is 44-55)


1Cantad al Señor un cántico nuevo,
cantad al Señor, la tierra entera;
2cantad al Señor, bendecid su nombre,
pregonad día tras día su victoria. 
 
3Contad a los pueblos su gloria,
sus maravillas a todas las naciones. 
7Tributad al Señor, familias de los pueblos,
tributad al Señor gloria y poder.
8Tributad al Señor la gloria de su nombre,
entrad en sus atrios trayéndole ofrendas. 

10Decid a los paganos: El Señor es rey:
él afianzó el orbe, y no vacilará;
él gobierna los pueblos rectamente. 

Explicación.

96,1 Teóricamente, el canto es nuevo la primera vez que se canta, no cuando se repite. ¿Es nuevo un canto hecho de retazosusados? Creo que el autor se mueve con el espíritu de novedad que anima al profeta del destierro.  

96,7-9 El autor toma los dos primeros versos del Sal 29, sustituyendo las "divinidades" por "familias de pueblos". Añade el tema del tributo y vasallaje y ensancha el horizonte a toda la tierra.
96,10 La segunda frase está tomada del Sal 93,1, la tercera falta en el paralelo 1 Cr 16,31; algunos suprimen ambas para que quede el clamor escueto. 
Trasposición cristiana.
Se pueden seguir dos pistas: el adviento y el reinado. Dejando la primera para el Sal 98, me fijo en la segunda. El Apocalipsis canta el reinado del Padre y de su Mesías: 11,15.17; 12,10-12; 19,6; véanse también 1 Cor 15,25; Col 1,13. 


EVANGELIO. Marcos 3,20-21.

Reacciones populares a la iniciativa de Jesús  

20Fue a casa, y se reunió de nuevo tal multitud de gente que no podían ni comer. 21Al enterarse los suyos se pusieron en camino para echarle mano, pues decían que había perdido el juicio. 

Explicación.

 
(3,20-21): La constitución del Israel mesiánico, que sustituye e invalida al antiguo (1,15; 2,21s), es un desafío a las autoridades judías. La opinión popular se divide. Una multitud, evidentemente descontenta del sistema, se apiña «en casa» (gr. oikos, cf 2,1; ahora la casa del Israel mesiánico). Los allegados de Jesús, en cambio, juzgan su acción una locura e intentan impedir su actividad.

VIERNES 25 DE ENERO DEL 2013.

PRIMERA LECTURA. Hechos 22,3-16 o 9,1-22

Hechos 22,3-16.

3 - Yo soy judío, nacido en Tarso de Cilicia, pero criado en esta ciudad; como alumno de Gamaliel, me eduqué en todo el rigor de la Ley de nuestros padres, con tanto fervor religioso como vosotros ahora.
4 Yo perseguí a muerte este Camino, apresando y metiendo en la cárcel a hombres y mujeres;
5 y son testigos de todo esto el mismo sumo sacerdote y todo el senado. Ellos me dieron credenciales para nuestros hermanos, y fui a Damasco para traerme presos a Jerusalén a los que hubiese allí, para que los castigaran.
               6 Pero sucedió que en el viaje, al acercarme yo a Damasco, hacia mediodía, de repente una gran luz celeste me envolvió de claridad,
7 caí por tierra y oí una voz que decía: "Saúl, Saúl, ¿por qué me persigues?"
8 Yo pregunté "¿Quién eres, Señor? Me respondió: "Yo soy Jesús, el Nazoreo, a quién tú persigues".
9 Mis acompañantes vieron el resplandor, pero no comprendieron lo que decía el que me hablaba.
10 Yo pregunté: "Qué debo hacer, Señor?" El Señor me respondió: "Levántate, sigue hasta Damasco, y allí te explicarán la tarea que se te ha asignado".
11 Como yo no veía por el resplandor de aquella luz, los que estaban conmigo me llevaron de la mano hasta Damasco.
            12 Un tal Ananías, hombre devoto al modo de la Ley, recomendado por todos los judíos de la ciudad,
13 fue a verme, se puso a mi lado y me dijo: "Saúl, hermano, recobra la vista". Y yo, en aquel mismo momento, recobré la vista y lo vi.
14 Él me dijo: "El Dios de nuestros padres se destinó a que conocieras su designio, vieras al Justo y escucharas las palabras de su boca,
15 porque vas a ser su testigo ante todos los hombres de lo que has visto y oído.
16 Y ahora, ¿a qué esperas?: levántate, bautízate y lava tus pecados invocándolo a él".

Explicación.

La fórmula inicial tiene puntos de contacto con la usada por Esteban (7,2), pero, a diferencia de éste, cuyo discurso era una invectiva contra el judaísmo desviado (cf. 7,51-53), Pablo declara desde un principio que habla en su propia defensa (gr. apología) (22,1). Según Lc (materiales propios), Jesús había prevenido reiteradamente a sus discípulos de no hablar en defensa propia (Lc 12,11; 21,14: gr. apologeomai). Así lo comprendió Esteban, por cuya boca habló el Espíritu Santo, y no pudieron resistir a sus palabras (6,10, cf. Lc 12,12; 21,15).

                    Proclamación profética y apología personal son incompatibles; la primera es irresistible, sin que los adversarios puedan contradecirla ni hacerle frente (cf. 4,8-12.14; 5,29-32.33; 6,10; 7,2-53.54s); a la segunda se puede contestar y no obtiene resultado alguno.

                    Por segunda vez, ahora en público, Pablo confiesa su identidad: "Yo soy judío" (3a lit., "individuo judío", expresión de cariz particularista; cf. Lc 22,58). Recuerda a la multitud su estancia en Jerusalén de joven y sus estudios rabínicos bajo la dirección de Gamaliel, el mismo que defendió a los apóstoles en el Consejo (3c, cf. 5,34).

                    Después de haberse presentado, les recuerda su propia conversión; es la segunda vez que se narra (cf. 9,1-19), ahora por boca de Pablo mismo. La primera parte del relato (6-16) coincide exactamente con la primera versión, a excepción de la revelación que le comunica Ananías sobre su futura misión universal ("ante todos los hombres") /14s).
 
 
Hechos 9,1-22.

1 Saulo, respirando aún amenazas de muerte contra los discípulos del Señor, fue a ver al sumo sacerdote
2 y le pidió credenciales para las sinagogas de Damasco, autorizándolo a llevarse presos a Jerusalén a los que encontrase que seguían aquel Camino, lo mismo hombres que mujeres.
                     3 En el viaje, al acercarse a Damasco, de repente una luz celeste lo envolvió con claridad;
4 cayó a tierra y oyó una voz que le decía:
                    - ¡Saúl, Saúl!, ¿por qué me persigues?
                     5 Preguntó él:
                    - ¿Quién eres, Señor?
                    Respondió éste:
                    - Yo soy Jesús, a quién tu persigues.
6 Anda, levántate, entra en la ciudad y allí te dirán lo que tienes que hacer.
                   7 Sus compañeros de viaje se habían detenido mudos de estupor, porque oían la voz, pero no veían a nadie.
8 Saulo se levantó del suelo y, aunque tenía los ojos abiertos, no veía nada. De la mano lo llevaron hasta Damasco.
9 Estuvo tres días sin vista y sin comer ni beber.




  SAULO RECOBRA LA VISTA GRACIAS A ANANÍAS.


                 10 Había en Damasco cierto discípulo de nombre Ananías. El Señor lo llamó en una visión:
                 - ¡Ananías!
                 Respondió él:
                 - Aquí estoy, Señor.
                11 El Señor le dijo:
                - Ve en seguida a la calle que llaman Derecha y pregunta en casa de Judas por un tal Saulo de Tarso. Ahora está orando
12 y ha tenido una visión: que un individuo llamado Ananías entraba y le aplicaba las manos para que recobrase la vista.
                13 Ananías replicó:
                - Señor, he oído a muchos hablar de ese individuo y del daño que ha hecho a tus consagrados en Jerusalén;
14 y aquí tiene poderes de los sumos sacerdotes para apresar a todos los que invocan tu nombre.
               15 El Señor le repuso:
               - Anda, ve, que ese hombre es un instrumento elegido por mí par que lleve mi nombre delante de los paganos y de sus reyes, así como de los israelitas.
16 Yo le mostraré cuánto tiene que padecer por ese nombre mío.
               17 Partió Ananías y entró en aquella casa, le aplicó las manos y le dijo:
               - Hermano Saúl, el Señor me ha enviado, Jesús, el que se te apareció cuando venías por el camino, para que recobres la vista y te llenes de Espíritu Santo.
               18 Inmediatamente se le cayeron de los ojos una especie de escamas y recobró la vista. Se levantó y lo bautizaron.
19 Luego tomó alimiento y le volvieron las fuerzas.


     SAULO PROCLAMA QUE JESÚS ES EL MESÍAS.


                Pasó unos días con los discípulos de Damasco,
20 y muy pronto se puso a predicar en las sinagogas sobre Jesús, afirmando que éste es el Hijo de Dios.
21 Todos los oyentes quedaban pasmados y comentaban:
                - ¿No es éste el que se ensañaba en Jerusalén contra los que invocan ese nombre?, y ¿no había venido aquí precisamente para llevarlos presos a los sumos sacerdotes?
               22 Pero Saulo se crecía y confutaba a los judíos que residían en Damasco, demostrando que Jesús es el Mesías.

Explicación.

 La conversión de Saulo ocupa el centro del tríptico. También esta secuencia consta de tres cuadros. El primer cuadro enlaza con el intento de Saulo de suprimir a la iglesia helenista (8,3), ampliando su radio de acción a las sinagogas de la diáspora (1s).

                    La primera fase de la conversión de Saulo tiene lugar en el camino de Damasco: primero ve una luz cegadora, experiencia visual (2, cf. 22,6; 26,13); luego escucha la voz de Jesús, experiencia auditiva, que lo llama en arameo por su nombre ("Saúl" persigue a "Jesús", su hermano, que se identifica con los perseguidos) y lo invita a levantarse de su postración (la "caída" de Saulo manifiesta externamente el derrumbamiento que se ha producido en su interior) y a ponerse en contacto con la comunidad de Damasco (4-6, cf. 22,7s.10; 26,14-16a).

                   Los acompañantes oyen ruido de voces, pero no perciben diálogo alguno ni distinguen a nadie (7, cf. 22,9; 26,13). Saulo, por su parte, ha quedado "cegado" por la revelación que le ha hecho el Señor (8a, cf. 22,11a), de cuyo contenido sólo se enterará el lector cuando Pablo tome conciencia plena de su misión (comp. 26,16-18; 22,17-21 con el enunciado escueto del v.6); al resistirle a aceptarla, la luz celeste lo ha dejado ciego; no así a sus acompañtes, quienes, según la versión dada más tarde por Pablo mismo, vieron la luz (cf. 22,9) lo mismo que él (26,13) y lo han de llevar de la mano hasta Damasco (8b, cf. 22,11b). Los "tres días" sin comer ni beber simbolizan el estado de muerte en que se encuentra (9).

                   Segundo cuadro: Da comienzo con la presentación de un personaje que representa a los discípulos helenistas de la diáspora (10a). Ananías tiene una visión del Señor, invitándolo a ponerse en contacto con Saulo, pues lo está aguardando (10b-12). El breve forcejeo con el Señor sirve para subrayar el fanatismo a ultranza del perseguidor (13s) y la calidad del futuro apóstol (15s).

                  La misión de Ananías es doble: vencer la resistencia de Saulo a aceptar a Jesús como el Mesías fracasado ante los judíos y que ha inaugurado el reinado universal de Dios ("para que recobres la vista") y bautizarlo con Espíritu Santo ("para que te llenes de Espíritu Santo") (17).

                 Saulo recobra la vista y es bautizado con agua (18; cf.22, 13-16). No se dice que haya recibido la fuerza del Espíritu, pero sí que va recobrando fuerzas (19a). La clave para entender este principio de conversión de Saulo (la conversión plena y definitiva tendrá lugar, como se verá, al final de Hch) reside en el tema "no ver/recobrar la vista", tema que ha aflorado ya en Lc 7,22; 18,31-34 y que reaparecerá en Hch 13,11, donde se podrá apreciar una serie de referencias a la presente escena.

                 Tercer cuadro: En Damasco, Saulo se dedica a predicar a los judíos que Jesús es el Hijo de Dios (20), el Mesías (22). Extrañeza de los oyentes (21). Saulo sigue fortaleciéndose (22).
 
SALMO. 117,1-2.

(Rom 15,11)
1 Alabad al Señor, todas las naciones,
aclamadlo, todos los pueblos.
2porque la lealtad del Señor
puede más que nosotros
y la fidelidad del Señor es perpetua. 
 
Explicación.
117 El salmo más breve del salterio. Un himno completo. Algunos han preguntado si era una antífona aplicable a otros salmos, o el esquema para un desarrollo libre. Un dato es llamativo: la motivación es nacional, "nosotros", la invitación es universal. ¿Es legítima y convincente la invitación? Pablo lo cita en Rom 15,11 para subrayar el alcance universal del mensaje evangélico. 

EVANGELIO. Marcos 16,15-18.

UN FINAL AÑADIDO AL EVANGELIO DE MARCOS.

Aparición a María Magdalena y a dos discípulos. (Mt 28,9-10; Jn 20,11-18; Lc 24,13-35).

15 Y añadió:
-Id por el mundo entero proclamando la buena noticia a toda la humanidad. 16El que crea y se bautice, se salvará; el que se niegue a creer, se condenará. 17A los que crean, los acompañarán estas señales: echarán demonios en mi nombre, hablarán lenguas nuevas, 18cogerán serpientes en la mano y, si beben algún veneno, no les hará daño; aplicarán las manos a los enfermos y quedarán sanos.


Sin comentarios (es un final añadido y no pertenece al autor del Evangelio).